El suelo radiante es un sistema de climatización que ofrece muchas ventajas, tanto económicas como de sostenibilidad. Instalar este equipo en casa o en la oficina proporciona un gran confort térmico y, además, ahorro económico. Descubre sus beneficios.
El suelo radiante es la calefacción que muchos hogares de países del norte de Europa prefieren. Se trata de instalar una red de tuberías bajo tierra, por donde pasará el agua caliente, calentando así los espacios. Proporciona una temperatura muy confortable, uniforme y saludable, por lo tanto los beneficios de este sistema son numerosos:
El calor, disperso, abarca todo el espacio, para que las tuberías instaladas hacen que el agua circule por toda la habitación. Es por esta razón que, con un sistema térmico de suelo radiante, disfrutarás de una
mayor sensación de confort térmico. Los especialistas en calefacción radiante pueden aconsejarte sobre
sistemas con alta capacidad de difusión y conductividad. Son instalaciones que proporcionan una mejor transmisión de calor.
Los equipos de climatización por suelo radiante son los que mejor pueden adaptarse a un sistema de energía renovable, como las placas solares fotovoltaicas. Así, si decides instalar la calefacción radiante, una futura decisión para cambiar a la energía renovable será más sencilla de tomar.
Sin duda es una cuestión que debes tener presente, que la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente es un planteamiento que no se puede dejar de lado, en un futuro próximo. El cambio climático nos obliga a todos a tomar decisiones responsables y comprometidas.
Menos energía para un mayor confort térmico
Efectivamente, si te pones del lado de la energía renovable y la sostenibilidad, siempre ahorrarás. Con este sistema de suelo radiante, no es necesario que el agua que circula por los conductos instalados alcance los setenta grados. Es suficiente una temperatura de cuarenta y ocho o cincuenta grados, dado que la convección de calor es homogénea. La temperatura térmicamente confortable te llegará desde el suelo, convirtiéndose así en la calefacción ideal, llegando a todos los lugares de la habitación. Conseguirás un ahorro económico muy relevante, sin renunciar al confort térmico deseable.
Suelo radiante, la calefacción recomendada por la OMS
Este sistema de climatización no proviene de un único punto de calor, desde el cual se ha a producir una difusión en el resto del espacio. Al ser una fuente de calor homogénea, no notarás corrientes de aire que hayan de propiciar una buena convección. Desaparece, por tanto, el riesgo de movimientos de polvo y ácaros, que son los responsables de muchas alergias.
Por otra parte, debes saber que la moderada temperatura que necesita el suelo radiante proporciona el calor óptimo de abajo arriba. El sistema no supera los veinte y siete grados, por lo que no perjudica la circulación de las piernas. Es el único sistema de calefacción recomendado por la
OrganizaciónMundial de la Salud (OMS).
La temperatura confortable que proporciona el suelo radiante tiene también una ventaja de carácter estético. Así, optar por este sistema te facilitará la distribución y la decoración de los espacios de tu casa o de tu negocio. Las paredes quedan libres de los radiadores convencionales.
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